Evidentemente, ya varios se imaginan las casillas de peaje de amigos del poder de turno a ambos lados de las cabeceras Santa fe y de Santo Tomé. Verdaderos “Factureros” para el poder de turno, como lo fueron las autopistas en su momento para Carlos Menem, y sus amigos, en los años noventa.

Lo cierto es que, por estas horas, Milei acaba de propinar un duro golpe a Maximiliano Pullaro. Antes de comenzar la construcción de un nuevo puente que refuerce al que ahora está fuera de circulación, ya se lo pide de antemano.

Pullaro tiene que convencerse que, los mas de mil días que le restan en el poder, serán un verdadero “Getsemaní”, en donde las gotas de sangre serán el monedero sonante de los santafesinos para pagar el nuevo puente.

Cabe decir que, a 7 meses del inicio de la obra, no se ha llegado al 50 por ciento de la obra, con la verdadera maldición que representa al laburante, o los chicos que concurren a la escuela, dar un rodeo de mas de 15 kilómetros por una zona en donde abundan los “robos pirañas” y los adoquines se impactan en lunetas y ventanillas.

Cuesta creer que, el “frente de Frentes”, haya ganado una elección sin haber proyectado siquiera, en su momento, un puente que reemplazara al octogenario puente de Santo Tomé. Así son los frentes: ganan por la bronca hacia el adversario pero jamás, por la propuesta.

Como lo diría Oscar “Cachi” Martínez en su momento, ex diputado provincial: “Ni Perotti se animó a tanto”.

PUENTE SANTA FE-SANTO TOME. MILEI QUIERE QUEDARSE CON ÉL.

Días pasados se vivieron momentos de intensidad y nerviosismo, cuando del área de Vialidad Nacional, hicieron llegar al poder político un mensaje: El Presidente Javier Milei, quiere que el nuevo puente Santa fe – Santo tomé, ( y a pagar por los santafesinos) sea usufructuado por la NACION.

Si se busca lo contradictorio en la gestión de Milei, aquí tiene el lector una “perlita”. Con el plan “Circunvalar” parado, el tren Santa fe – Laguna Paiva sin correr, con las rutas del mercosur detonadas, ahora la Nación quiere quedarse con la inversión que realizará el año próximo la provincia.

Evidentemente, ya varios se imaginan las casillas de peaje de amigos del poder de turno a ambos lados de las cabeceras Santa fe y de Santo Tomé. Verdaderos “Factureros” para el poder de turno, como lo fueron las autopistas en su momento para Carlos Menem, y sus amigos, en los años noventa.

Lo cierto es que, por estas horas, Milei acaba de propinar un duro golpe a Pullaro. Antes de comenzar la construcción de un nuevo puente que refuerce al que ahora está fuera de circulación, ya se lo pide de antemano.

Pullaro tiene que convencerse que, los mas de 1000 días que le restan en el poder, serán un verdadero “Getsemaní”, en donde las gotas de sangre serán el monedero sonante de los santafesinos para pagar el nuevo puente.

Cabe decir que, a 7 meses del inicio de la obra, no se ha llegado al 50 % de la obra, con la verdadera maldición que representa al laburante, o los chicos que concurren a la escuela, dar un rodeo de mas de 15 km por una zona en donde abundan los “robos pirañas” y los adoquines se impactan en lunetas y ventanillas.

Cuesta creer que, el “frente de Frentes”, haya ganado una elección sin haber proyectado siquiera, en su momento, un puente que reemplazara al octogenario puente de Santo Tomé. Así son los frentes: ganan por la bronca hacia el adversario pero jamás, por la propuesta.

Como lo diría “Cachi” Martínez en su momento, ex diputado provincial: “Ni Perotti se animó a tanto”.