Política
En la "B"

En el gobierno de Pullaro se sacan los ojos: Scaglia cotiza en baja, su puntera no rinde y no hay un mango

Un mal momento para Gisella Scaglia.

¿Dónde hay un mango, viejo Gómez? Más o menos así dice la letra del popular tango. Cuentan los memoriosos que, cuando se armó el Frente de Frentes, una ambiciosa coalición que ya está crujiendo, en el reparto de cargos quedaron afuera parte del PRO y del Gabinete de Jatón (que contribuyó al triunfo). El Gobierno de Maximiliano Pullaro ya no puede contener a la coalición y no cumplió con aquellos que le militaron.

Veloces mastines

Olfateando la presa, el ex residual PRO, que intentase llevar como intendente capitalino al empresario Alberto Bottai, lo bajó a tiempo, con la promesa de que, un hombre de sus ¿lides?, Cristian Cunha, tuviese un pedazo del cuchillo con el cual se corta la torta en el Gobierno provincial.

Luego de asumido el Gobierno provincial de Maximiliano Pullaro, enfrentó una de las internas: el PRO, dentro de su gabinete. Cristian Cunha le planteó una interna a Gisella Scaglia.

Antes que se venzan los plazos, Cunha bajó su lista. El arreglo estaba formalizado. Pero anterior a esto hubo otra instancia. En el pulverizado partido de los “globertos”, habían quedado chapas y chapitas sin repartir. Y ya no había más lugar en el gobierno. Los cuatro puntos cardinales sobre los cuales se asienta el radicalismo, tenían su lugar.

Sojeros, Perotti, y la historia

Sabido es que la provincia de Santa Fe no pertenece más al peronismo y en la última elección, el “León” tuvo una excelente cosecha. El colchón sojero y la falta de caciques contribuyeron a esto. Tanto, como la inacción del Gobierno de Perotti y los más de 15 años de socialismo. Un tributo a esto es la caída parcial del puente carretero Santa Fe - Santo Tomé, que permite el paso de turistas de Brasil, Paraguay, Uruguay, Chile.

Un fracaso donde Poletti se estrelló

Así, sin “cucha” en ninguna esquina, llegó la gente de Gisella Scaglia al gabinete de Juan Pablo Poletti, en la Municipalidad de Santa Fe. Había que pagar las caminatas con la “Pato”, y las hamburguesas en la peatonal, además de las gaseosas con edulcorante para no aumentar más las abultadas cinturas que las fajas térmicas no podían disimular más. En un caso inédito en la glamorosa historia cultural de Santa Fe, hace su debut una abogada de la mano de Scaglia, ni más ni menos que en el área de Cultura local: Luciana Ceresola. A todo esto, entre gallos y medianoche, Barletta había plantado sus propias banderas, para una carrera 2027. Presionó a Poletti por otra Secretaría para su hija Alicia, y otra hija en el Concejo municipal.

Malas decisiones

Abrazada a los principios del catolicismo y con rosarios colgados de su espejo retrovisor, la “cristiana” y “ultracatólica” comienza por vulnerar los principios mismos del sagrado libro, restregando los 10 mandamientos por la luneta trasera de su auto. Sin baños para los empleados y con ventanales rotos en la ex Estación Belgrano, lo primero que hizo fue dejar sin efecto el contrato del director de coros de Alto Verde, una comunidad un tanto marginal cuyo viejo puente la define: “el puente Palito”. Rencorosa, sin un mango donde rascar, sin preparación propia y con un analfabetismo propio de quienes se han formado con un PDF, siguió su embestida feroz contra contratados y organismos culturales. Cumpliendo entonces con los principios propios del PRO: atacar todo lo que sea cultura.

Lo que siembras, cosecharás

Alicia Barletta, secretaria de Educación, en estos seis meses, y conforme a su formación, ha logrado encolumnar y orientar a buena parte de la comunidad. Formada en su especialidad, es todo lo opuesto a Ceresola, que pasa su tiempo dando bajas y buscando precios de pinturas baratas en Marketplace. Un dato: en la reciente feria Diseña Santa Fe, no hubo nadie. Ni en la inauguración ni en los días posteriores. Por los malos tratos y la desinformación, los expositores y feriantes prefieren irse a Paraná, o a Rosario, donde reciben mejores tratos, atención y difusión a sus laboriosos productos.

Si algo le faltaba a Poletti para demostrar hasta ahora su incapacidad es su Secretaría de Cultura, hay achique, cero gestión, bajas en los contratados calificados en la gestión Corral, un Liceo Municipal con matrículas más bajas en la historia, un boulevard que se desangra en aguas turbias bajo los canteros.

Todo una letra para un tango. Y más.

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